Hace unos días descubrí a esa persona que siempre encuentro en mi espejo cada vez que me asomo a el pensando en cosas ciertamente lúgubres. Creo que nunca te lo he dicho, pero cada vez que me asomo a ese marco sin ventana, a esa foto sin papel, siempre veo algo que no me gusta. Veo esa mirada triste clavada en mis propios ojos, llorando al mismo tiempo que los míos cuando toca y vacíos cuando no. Pude ver que estaba pensando en ti (como siempre, la verdad), pero en esa expresión, en esos ojos gemelos de los míos vi una tristeza mayor. El gemelo de mi espejo me descubrió que, por primera vez en mi vida, había pensado en que de verdad era posible, aterrador pero posible, que nunca más te volviese a ver o ni siquiera a saber de ti...
Le pregunté a ese fantasma de mi soledad, que solo se deja ver cuando nadie más está presente, que qué pasaría entonces. Con el paso del tiempo no sabría si estarías viva o muerta, bien o mal, feliz o desgraciada, si aún me querrías o me guardarías rencor, si volverías a amar y solo sería una mancha que borrar en tu pasado o si para ti seguiría siendo "yo". No esperé a que me contestase, Vi en la cara de ese ser parecido a mi un destello de infinita pena y le dejé con la palabra en la boca. Me propuse volver a reinventarme y simplemente recoger lo que quedaba de mi alma en el otro lado del espejo y con esos pedacitos de alma seguir haciendo malabares. Dejé al hombre de la mirada triste atrás, encerrado en su mundo de reflejos y cerré la puerta, esperando que con cada nuevo sol aparezca algo que le haga sonreír
La verdad es que te quería contar una cosa. hace un tiempo pasó algo. Recibí un mensaje de un amigo del alma en el que me decía que el temor de mi hermano de cristal se había hecho realidad, pero en su vida. En ese momento el teléfono pesó en mi mano tanto como una piedra, y al alzar mi mirada le volví a ver, y me habló. No puede taparme los oídos a tiempo. Me dijo "¿y si te pasa a ti? ¿Estarías dispuesto a vivir el resto de tu vida de espaldas a ella, a quien tantas veces llamaste 'tu amor', sabiendo que te puede necesitar, que está mal, y tu no la escuchas?"
Hasta ahora he vivido con el deseo de, más que apartarte, erradicarte de mi vida, repudiarte para siempre. No puedo vivir teniéndote a medias, ni sabiendo que no soy parte de ti, ni sabiendo que puedes volver a amar a otro que no sea yo... Pero supongo que peor que pase una de estas cosas, y ciertamente me destroce el alma, será saber 'a posteriori' que me necesitaste y que no estuve, que te podría haber ayudado y que no estuve, que pude serte útil y no estuve...
Hasta que vi que mis propios ojos me eran extraños, que sufrían tanto como nunca podré concebir, no me di cuenta de que los reproches tales como "tu no estuviste ahí para mí", "cada vez que me hiciste falta me abandonaste", aunque ciertos o no ya no me valen. Hasta ahora viví valiéndome por mi mismo viendo que me habías repudiado, ahora veo que no puedo vivir sin saber que estás bien y que me tienes a tu lado si no lo estás.
No creo que me leas, no me contestas a los mensajes, no se nada de ti El hombre del espejo está a punto de cruzarlo y tomar mi lugar, pero no quiero ser el, no quiero ser hombre que te perdió para siempre.
-(_ArkangeL_)-Me quedaré rezando al dios del Hades